11 Un
viaje a Frigiliana (La Frigilian máfica)
Ramón Fernández "Palmeral". Guía.
Un tigre se apodera de mi estómago
En
la maraña de los días, conforme avanzamos en la edad, uno se viste con ropas de
amor a la tierra esperando el infinito regreso como una querencia tengo por tu
acento que diría Miguel Hernández. Todo viaje tiene tres fases: prepararlo,
hacerlo y contarlo; sin embargo, cuando ya estaba cerca de hacerlo, era como si
un tigre estuviera en mi estómago, y un zarpazo de la postrera sombra me
acudiera a la memoria. Los días de la Navidad de 2011 estuve en
Frigiliana. Nos encontramos en el rincón lisonjero de la Axarquía
(“aquella que está en el xarq, el lugar por donde sale el sol"), y
hemos de recordar que el 21 de marzo de 1483, toda la Axarquía y hoya de Vélez
(Frigiliana pertenecía de Vélez), Comares, Sedella, Bentomiz, y sus
castillos, lugares y alquerías fueron alertados, pues un gran ejército de
cristianos se adentraba a través de los montes occidentales. La expedición la
componían unos mil caballeros y unos tres mil infantes y salió el 19 de Marzo
desde Antequera.
Los moriscos de la Axarquía de dividían entre "moriscos de paces" y los "moriscos de pelea", lo sde pelea eran los de Bentomiz y Frgiliana, que fueron aniquliados y echos escalvos. Los de paces dispersados respetando suys vidas.
Los moriscos de la Axarquía de dividían entre "moriscos de paces" y los "moriscos de pelea", lo sde pelea eran los de Bentomiz y Frgiliana, que fueron aniquliados y echos escalvos. Los de paces dispersados respetando suys vidas.
Este grupo de
aventureros cristianos, encabezados por el Maestre de Santiago y el Marqués de
Cádiz (que perdió dos hijos), se adentraron en estas tierras. No contaron los
expedicionarios con lo agreste y fragoso del terreno, desconocido para ellos,
ni con la bravura de sus moradores dispuestos a defender sus tierras y hogares.
Mientras que unos
portaban a sus hijos, ganados y enseres a las atalayas y castillos cercanos
para protegerlos; otros hicieron frente a los soldados de los que varios
centenares fueron muertos y unos 1.500 hechos prisioneros. La batalla fue ganada por los moros de Bantomiz.
Pasando
a los tiempos de este relato. La carretera culebrea cuesta arriba, por una zona
de chalet y casas de campo. Tiene buen asfalto. Al dejar la Molineta y subir
por una curvas vemos la muralla imponente de la sierra de Frigiliana, El
Fuerte, y Frigiliana acostada como una cabra blanca en unos riscos, bajo el
cero donde estuviera la alcazaba árabe, que fue destruida por los cristianos, y
del que ya hablaremos más adelante. En la Molineta estuvo un destacamento
de la Guardia civil y Regulares en la posguerra.
El paisaje es montañoso entre dos
terrenos diferentes; pizarra y el relieve kárstico de la sierra Almijara que
hace de escudo natural protegida de los vientos del norte. El paisaje urbano es
alargado con curva central en forma de plátano encalado. Es uno de los pueblos
blancos más bellos de España que ha sabido conservar un casco antiguo mudéjar
como inteligente desarrollo sostenible que le ha servido como atractivo
turístico para el crecimiento de su población, economía e inversiones
institucionales.
Mi idea, nada
más llegar a la cabra blanca acostada en la Almijara (Frigiliana), era entrar
hasta la biblioteca en el Casa del Apero, para ver las últimas novedades sobre
Frigiliana y la Axarquía. Aunque mi idea era también repasar algunas Actas
municipales en el Archivo Municipal sobre todo en tiempos de la II República,
la Guerra Civil y posguerra, pues fue este pueblo lanceado por los maquis, que
ahora llaman guerrilla antifranquista, aunque su actuación era más parecida a
bandidos que a la de guerrilleros contra el franquismo, pues como escribe un
aguanoso adoptivo David Baird aquello era “una mezcla de comunistas,
socialistas, sindicalistas, anarquistas, huidos de la represión franquista sin
ninguna creencia política, y sin duda unos ladrones sin escrúpulos”.
Parada en la plaza
del Ingenio
Cuando
se llega a Frigiliana nos encontramos una rotonda, si se sigue la carretera de
circunvalación solo veremos edificios nuevos a la derecha y banales al
izquierda, lo mejor es tomar a la derecha para tomar la calle San Sebastián. Lo
más acertado consiste en aparcar el vehículo alejado del enganche de la grúa, y
caminar. Desde el balcón donde se ubica la Biblioteca Municipal veremos o
adivinaremos el río Higuerón.
Hace
muchos años, cuando eran joven visité la Cueva Oscura y de los Murciélagos de
Frigiliana La entrada es muy estrecha, siendo necesario arrastrarse un
poco. Por supuesto que a pesar del corto recorrido es imprescindible llevar luz
(linternas, frontales y pilas de repuesto) ya que posee varios recovecos que
pueden desorientarnos a la hora de buscar la salida. El recorrido se realiza en
unos 30 minutos si vamos deteniéndonos para observar las distintas formaciones
de estalactitas, estalagmitas y columnas de la cavidad. En su interior existen
algunos pequeños charcos de agua formados por el incesante goteo de la roca.
Cerca de allí está la Cruz de Pinto que tiene su origen en el comienzo del siglo XIX; al parecer un barco estaba en peligro de naufragio y el único punto visible que podía reconocer la tripulación era esta colina, el capitán del barco, llamado Pinto, prometió que si se salvaban construiría una cruz en lo más alto de dicho lugar.
La
primeras casas nuevas dan paso a una calle ancha, a la izquierda una especie de
jardín, donde esta una tienda de mi tía Salvadora que lleva con sus hijas
Rita y María Dolores que es para obligada desde tiempo inmemorial... Un poco
más abajo esta la calle de Antonio Navas Acosta, historiadores y alcalde por
dos legislaturas, nació el 31 de diciembre de 1932, falleció el 12 de junio de
1994 su prematura muerte a los 61 años motivó que se suspendiera la romería de
San Antonio prevista para el día siguiente., el alcalde que más hizo por este
pueblo, entre otros asuntos se le recuerdo por ser el promotor de los
doce cuadros cerámicos de la historia de la batalla de “El Peñón de
Frigiliana”; es también autor de varios libros sobre su pueblo. Hemos de
visitar su casa. Fue axárquico de honor en 1988, y otras condecoraciones. El Peñón de FRIGILIANA es El Fuerte, nombre que recibió esta defensa de altura a partir de 1569. Aquí estuvo Frigiliana la Vieja. Que fue fortaleza desde los visigodos y árabes, luego estos a partir del siglo Xl bajaron la actual Frigiliana y construyeron el pequeño castillo de Lizar.
Cuando uno llega a Frigiliana, lo primero que se encuentra es
un enorme edificio de cinco plantas, construido en el desnivel de un barranco,
que no tiene el aspecto de un aparcamiento, pero que sí lo es. Sin
embargo, canto, y los cientos de turistas que quieren visitar el famoso
casco urbano morisco, se las tienen que ingeniar para poder aparcar en las
inmediaciones. El recinto privado fue construido por un promotor, que después
de invertir unos ocho millones de euros, lo abrió en 2008. Abrir este
aparcamiento es fundamental para el desarrollo turístico de Frigiliana, uno de
los mayores problemas de esta localidad es la falta de aparcamiento. Por el
impago de una hipoteca Banesto es el propietario, que es casto, a no sé qué, no
lo quiere abrir, salvo contadas ocasiones con la fiesta de Las Tres Culturas. Fiesta de la 3 Culturas es un de las fiestas mas importantes de la Axarquia.
Hay que dejar
el coche en el aparcamiento cerca de la plaza, del ingenio, el recorrido por
Frigiliana hay que hacerlo a pie, pisar el terreno como en la infantería, hasta
que n o se pone la bandera no se puede considera el terreno conquistas, y queda
mucho por conquistar.
Apenas dos años y medio después y ante la imposibilidad de hacer frente al pago de las hipotecas, la entidad financiera Banesto se quedó con la mayor parte del complejo, que desde entonces está cerrado y únicamente es utilizado por los vecinos que tienen plazas en propiedad.
El Ingenio es una fábrica de miel de caña, la única de Europa desde 1720. Este edificó de 2.000 metros de superficie era el palacio o casa solariega ser los condes de Frigiliana los Manriqueño de Lara, de los de Montellano y de los duques de Fernán Nuñez. Y propiedad de la Sociedad de los de la Torre desde que formaron las escrituras en 1930, despues de dos años de negociaciones. En la explanación hay una farmacia que antes fue el cuartel de la Guardia Civil, que en el año 1952, pudo acabar con la lacra guerrillera del bandolerism del "Roberto", que secuestraron, mataron y robaron a los vecinos de Frigiliana y el Acebuchal, pagando con sus vidas, no sin cometer argunos errores propios como el suceso de la lona de las Vacas.
En la plaza hay una parada de burros taxi. Un tienda de souvenir, caja ser ahorro y aparcamiento. No se puede ni se debe entrar en coche al casco antiguo, simplemente porque el coche se te va quedar atacado, y la grúa tiene que venir de Nerja. Es un pueblo, que tiene el titulo de villa desde que se lo concedió Felipe lV en 1640. Esta hecho para caminar. Hay que refrescarse en los bares o restaurantes como El tangay, Sacristán, el Casinos y otros de altura cerca del Peñón de la Sabina. Visitar el casco antiguo mudéjar y morisco. Soy guía no oficial.
Y recordado poemas del poeta
aguanoso Francisco Ruiz Nogueras:
El antiguo palacio, convertido en
ingenio,
Exhala el aroma de la miel y el
bagazo
Que ungió nuestra memoria, y aún
vive en el recuerdo
La imagen de las tardes al salir
de la escuela.
Subida a la loma
donde estuvo el castillo de Frigiliana o Lízar. El Acebuchal
Pasado el taller de
motos de los Cobos se empina la carretera y donde está situado el cartel de
Sierra de Tejar Almijara, con una cabra montés a la derecha empieza un carril
de tierra que lleva al cerro dominante donde estuvo el castillo, más bien
alcázar de Frigiliana.
Ha costado pero la
vista dominante de Frigiliana en impresionante, y desde aquí se ve la costa de
Nerja, por ellos se eligió por los árabes este punto estratégico y dominante Se
encuentra a unos 350 metros de altitud.
Subiendo la carretera, y
en los viñedos de moscatel, famosa en tiempos árabes pues en esta zona la
prohibieron de beber alcohol, precepto del Corán fue derogado al considerarse
bebida espirituosa.
El vino dulce Málaga
era conocido como el “charab almalaquí”, que se encuentra en la poesía
árabe. Los árabes de la axarqia no respetaban el precepto coránico de no beber alcohol, por lo que pagaban una especie de multa.
Era zona donde se
cultiva la morena, para la seda cuyos olores era muy vivos. El color púrpura de
obtenía un caracol Murex brandari, abundante en la costa malacitana. El
tinte consiste en una mucosidad o secreción de la glándula hipobranquial. Los
fenicios también hacían un tinte entre púrpura e índigo, llamado azul real o azul de
Jacinto, el cual era fabricado a partir de una especie muy parecida de
caracol de mar, llamada Murex
trunculus, comúnmente conocido como cañadilla. Este tinte era el
conocido por los fenicios en Tiro, posiblemente los romanos aprendieron de los
fenicio, y los árabes de la tradición bizantina.
Y telares para tisú
o telas muy ricas los o la conocida por “rwas almodzahhab”. Cuando llevaron los invasores castellanos se cargaron el comercio de la seda.
Las mercancías más
valiosos como la seda, y los tisú, posiblemente eran llevados a Málaga, para
embarca en alguna coca o galera genovesa, pues está documentado históricamente
por el profesora Blanca Gari “El Reino de Granada y la política comercial
genovesa en la Península Ibérica en la segunda mitad de siglo XII” Instituto de
Estudios Almerienses, 1988. Las relaciones exteriores del Reino de Granada
tuvieron relaciones comerciales con los genoveses, el consulado Genovés, cuya
torre estaba cerca de la desembocadura del río Guadalmedina del siglo XIII al
XV.
Uno de los acuerdos
comerciales se firmó en Génova, el 18 de abril de 1279 entre Guillermo Bruno,
Oberto Spinola y Oberto Doria, capitanes de la república de Génova reunido en
Abul-l-Abbas, nuncio y embajador del Reino de Granada.
También tenían
relaciones comerciales con la Corona de Aragón, sobre todo, con los musulmanes
del reino de Valencia, muy dispuestos a ayudar a los granadinos del reino
nazarí. El puerto de Almería era el más frecuentado por los Valencianos y
catalanes, se comerciaba con seda, paños, telas, azúcar, frutos secos (pasas e
higos), aceite, cuero y pieles. En los Archivos del Reino de Aragón existe
abundante documento. Actualmente una de las playas cerca de Cabo de Gata sigue
llamándose “Los Genoveses”, esta playa tiene forma de bahía o rada donde posiblemente
los genoveses recalaban sus galeras dependiendo del tiempo en la mar.
La carretera
encuentra una bifurcación a la derecha, se llama la cuesta del Pedregal, hoy un
carril a los pies de El Fuerte. Antiguamente era una vereda de elevada pronunciación,
y cantos rodados de piedra caliza, piedra usada en las caleras que abundaban
por aquí para hacer cal. En el collado que llaman hoy del pintor porque es
propiedad del pintor danés Arne Haugen Sorensen, que además tiene casa en la
plaza del pueblo, vive aquí desde hace más de treinta años. Esta finca se sitúa
en el cerro de Catavares, donde mi abuelo tenía una viña. Desde aquí el paisaje
mira al “Comendaor” y al Mayarín, tierra pedregosa ideal para el cultivo del
olivo. Olivar cuyo topónimo recuerda que aquí estuvo el campamento del
Comendador Mayor de Castilla, Don Luís Requesens, en el asedio al El Fuerte en
1569. Por aquí hubo un cementerio, pues cavando lo olivos mis abuelos
encontraban hueso y alguna oxidad España o puñal. Hoy hay allí una explotación
de leche y carne de cabras.
A la vera del camino estaba
el cortijo donde mataron al último guerrillero el Lomas (Antonio Sánchez Martín) cortijo que era de Ángel Rojas, el último guerrillero o
bandolero que mataron el 20 de enero de 1952 día de San Sebastián, recojo el suceso según lo cuenta
Aurelio Torres Sánchez, conocido por el Obispo, oriundo de la Acebuchal:
… Antonio Lomas tenía dos hijas,
una, un año mayor que yo y una un año menor que yo. Tenía una cogida de la mano
cuando le pegaron un tiro al marido en el corazón. Fue el teniente que hubo
aquí. Ese hombre tenía que tener hijos también. Lomas tenía una pistola y una
bomba de mano. La puso en el poyo del cortijo. Se entregó. El teniente con el
fusil a la bandolera, acercándose. Y cuando estaba así, a un metro, ¡pon! Y lo
mató.
Lo sé seguro y lo digo. Tan seguro como que el que iba acompañando al teniente
es un Señor Alarcón, que estará muy viejito. y vive en la Calle Alcalá en
Madrid. Estaba de Guardia Civil aquí y lo estaba acompañando a este hombre
cuando vio esta muerte. Se vino aquí y estuvo seis o siete días sin salir.
Pidió excedencia. Lo echaron a Arenas, y de Arenas a los siete meses se salió
de la Guardia Civil y se fue de taxista a Madrid. Hace más de 20 años llamó al
Ayuntamiento: que si vivía la familia de mi mujer. Vino a Frigiliana para estar
tres días con la familia. Entonces me dijo que esto fue así y me lo contó. Es
verídico.
(Historia de los maquis. Entre dos fuegos. David Blair, 2008, pág. 302)
El cadáver del Lomas
lo montaron boca abajo sobre un mulo, y escoltado por su mujer y dos hijas lo
trajeron a la puerta del cuartel de la Guardia Civil para hacer el informe. En
la sierra que quedaba nadie, solo huesos, cabras monteses y quebrantahuesos
rondado los cielos de uno de los más dramático y sangrientos momento de la
historia, después de la batalla del Peón de Frigiliana y El Fuerte donde estuvo
Frigiliana la Vieja.
El carril continúa
por la falda de El Fuerte, pasando por debajo del chalet de la pintora,
hasta el la bifurcación a
el Acebuchal, que desde siempre se llamó de los Cuatro Caminos. En el Acebuchal te encontrarás con en bar restaurante de Vitudes y su marido Antonio. Una de las aldeas mas maravillosas que aparece en mi novela "El cazador del arco iris" Si en cambio, por el lado de la izquierda bajaba un camino peatonal al Cortijo del Pino, cortijada que se puede ver a penas a 200 metros, desde donde se ve un gran pino que se plató por los años cuarenta y que una gran rama derribó un rayo en una tormenta de los años 60. Aquí está la ermita que los hijos del Acebuchal construyeron con donativos en 1982. Y donde se celebraba la Misa el último sábado del mes de San Juan.
el Acebuchal, que desde siempre se llamó de los Cuatro Caminos. En el Acebuchal te encontrarás con en bar restaurante de Vitudes y su marido Antonio. Una de las aldeas mas maravillosas que aparece en mi novela "El cazador del arco iris" Si en cambio, por el lado de la izquierda bajaba un camino peatonal al Cortijo del Pino, cortijada que se puede ver a penas a 200 metros, desde donde se ve un gran pino que se plató por los años cuarenta y que una gran rama derribó un rayo en una tormenta de los años 60. Aquí está la ermita que los hijos del Acebuchal construyeron con donativos en 1982. Y donde se celebraba la Misa el último sábado del mes de San Juan.
Si
continuáramos el camino pasaríamos por una serie de cortijillos, entre ellos el
de Las Pistas. Se llamaba de las pitas pues antes de hacer el carril aquí
abundaban las pitas o agaves como lindero de la loma. Es lo que se conoce como
la Umbría, lugar muy ladero de viñas,
húmedo, ideal para las higueras y las viñas. Aquí decía mi padre que
“nacía el viento” pues son las primeras tierras con las que se encuentran las
térmicas del aire de la sierra.
Hay que visitar el Museo Arqueológico, la iglesia de San Antonio, del siglo xvl, la Fuente Vieja del mismo siglo, los museos de pintura y galerías de arte. El archivo municipal, la casa de Apeos, y además hay nueve rutas de senderismo, y se puede subir andando a El Fuerte. O los cachorros del río Higuerón.
Ramon Fernández es autor del libro: "Reseña histórica de la villa de Frigiliana".