martes, 22 de octubre de 2019

Buscando culpables en la Moncloa



Buscando culpables en la Moncloa

Una cuesta se inclina para Pero Sánchez en la próximas generales, por no haber sabido gestionar con contundencia desde el primer momento la rebelión catalana de los independentistas.

Ramón Palmeral

Al  caballo PSOE se le están saliendo las tripas por la cincha después de que el toro catalán del separatismo le haya alcanzado en la barriga, sin peto. La calle hacia  las elecciones generales del 10 N se le está poniendo cuesta arriba como en los pueblos de montaña de la Axarquía. En cada página del boletín de las noticias las encuestas tiene las flechas cada vez más bajas, como si el tsunami le hubiera venido encima por la mala gestión de la insurrección catalana o vandalismo institucional, quizá, por no  actuar a tiempo, con la idea de la proporcionalidad del uso de la fuerza legítima cuando la violencia incendia las calles de Barcelona, y otras sucursales provinciales de Cataluña. Las manifestaciones pacíficas son legales, sí, pero nunca las violentas, no los cortes de carreteras, puertos o aeropuertos, porque atentan contra los derechos de las personas que no pueden transitar libremente y se convierten en rehenes de los hordas bárbaras.
Sin duda alguna la repetición electoral le va a pasar factura a Sánchez, porque tuvo la oportunidad y no la cogió compartiendo ministerios con Unidas Podemos. Ahora, antes los extremismos separatistas, imposibles de asumir dentro de la Constitución del 78, la barra del salto de altura de los 140 escaños previstos se le van a venir abajo con toda de seguridad.  Porque está demostrado  que cuando surgen revoluciones sociales incontroladas nacen partidos contarios (equilibrio de fuerzas), como sucedió en la II República, que  nació la Falange de José Antonio Primo de Rivera en 1933. Ahora, actualmente, tras el referéndum ilegal del 1- 0, y la declaración de minutos de la independencia por  el Parlamento catalán se fortaleció Vox, y las derechas, y el centro. Porque solamente hay que mirar a la historia para saber que esto es así. Cuando nacen unos revolucionarios, saqueadores, incendiarios, y la hordas contra el orden público se desatan, nacen contarios, personas de orden que deseamos la unidad de España, porque así se votos en la Constitución y nacen “tsunamis españoles”. Porque lo independentistas no tienen ninguna empatía con los catalanes que no lo son.
Los dirigentes socialistas ya están buscado culpables en la Moncloa, en el gabinete de Sánchez y sus asesores, alguna cabezas rodarán porque la previsiones de la cuentas lectorales no salen. Podría hacer un descalabro imprevisible, por culpa de variables imprevisibles y una mala gestión el ministro del Interior que no ha querido emplear la fuerza necesaria (como por ejemplo camiones “botijo”) desde el primer día, y  el envío de más fuerza destacada. Pensar que con las leyes duras se solucionan los separatismos, es un error, porque primero se emplea la fuerza contundente, que detrás vendrás los jueces. El separatismo es un sentimiento que viene desde el reinado de la reina Isabel II (mal casada con su primo Francisco de Asís Borbón, que se debió casar con Antonio de Orleans, duque de Momtpesier).
Calcularon los cerebros de la Moncloa  que con 140 diputados más los de «Más País” y los traidores de PNV le daría la mayoría necesaria; sin embargo, visto lo visto las derechas se van a fortalecer, simplemente porque cuando surgen secesionismos surgen también defensores unionistas, aunque sean liberales, y esto, siempre, hasta la fecha ha sido así, fuerzas contrarias nacen en un teatro de compensaciones ideológicas como un organismo biológico.  Es imposible que Sánchez, tras las hordas desatadas de Cataluña saque 140 diputados. Si para qué gasto tinta si esto ya lo escribiera el republicano arrepentido José Ortega y Gasset en La rebelión de las masas (1929).
Aquel, alto y gallado madrileño,  que prometía diálogo cuando ganó la moción de censura con los votos de ERC, ahora no quiere dialogar con el desaparecido Quim Torra “hay que apretar” sabe de antemano lo que le va a pedir: “ Si me prometes por escrito notarial un referéndum, yo te paro en 24 horas las algaradas en Cataluña”. Porque de todos los españoles es sabido, y cuando el  río suena agua lleva, es que es verdad, que tanto ANC como Òmnium y CDR, están subvencionados por el Gobierno catalán, y que por malversación de fondos públicos (entre otros delitos) están condenados los políticos del “procés” integrantes del anterior gabinete (excepto Puigdemont que huyó como un zorro en un maletero), con un juicio justo y transparente que se ha quedado corto con no condenarlos por rebelión.
Pedro Sánchez ha querido jugar a ser el chico buena de la película, y esto, sin duda le va a costar una debacle en la generales, porque ha hachas están levantadas, y también las hoces y los martillos. Porque un cosa es prometer y otra hacer. Pero lo malo de todo esto es que le pueden salir una Vicalvarada de las Fuerzas Armas con la bandera en mano del art. 8 de la Constitución que dice: «Las Fuerzas Armadas, constituidas por el Ejército de Tierra, la Armada y el Ejército del Aire, tienen como misión garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional». ¿Y quién lo cuestiona? Los medios de comunicación están soltando amarras del bulo de que militares en su tiempo libre se acercan a Cataluña para apoyar a Guardia Civil, Policía Nacional y Mossos. 
Se ha visto que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado desplazadas a Cataluña han sido insuficientes, y encima han sufrido cerca de 270 heridos, más que los detenidos que no llegan a 200, ¡esto es inaudito, increíble!, y reafirma lo que digo: han faltado refuerzos policiales. Cuando veía arrojar todo clase de objetos a la policía, inmóvil, como unos judas, a me entraban ganas de llorar.  Además están denunciando que no tiene ya materiales antidisturbios y necesitan auxilio, al 7º de Caballería. No se puede dialogar con la violencia en la calle y sin denunciarla explícitamente. 


Publicado tambien en Diario de Alicante 22-10-2019