sábado, 11 de noviembre de 2017

Publicación de libros bajo demanda en LULU.com

Entrevista:BOB YOUNG, CREADOR DE LULU.com

"El ingrediente secreto de Lulu.com es que damos al autor el 80% de los beneficios"

El creador del servicio de autopublicación más popular del mundo asegura que está naciendo una nueva categoría de libros, que no interesan a las editoriales




Lulu.com, el servicio de auto publicación de libros de Bob Young, no quiere editar a los grandes autores, si no al resto de la humanidad a la que le ofrece el 80% de los beneficios de las obras gracias a un sistema de impresión bajo demanda, que permite publicar sólo las copias que se venden. "¡Es la revolulución!", dice un más que optimista Young, quien se considera ante todo un emprendedor que ha encontrado un nuevo sector que poner patas arriba. "Los editores han dejado de decidir qué es lo que les llega a los lectores", explica.

"Las editoriales trabajan con autores reconocidos, Lulu con el resto de la humanidad"
Young puede permitirse ser temerario, pues su anterior experiencia se llama Red Hat, compañía que fundó en 1994 y que ha logrado hacer negocio del código abierto. De hecho desde que el código abierto empezó a tomarse en serio, Young perdió interés y buscó una aventura temeraria donde le vuelvan a mirar como un marciano tratando de hacer negocio de un supuesto imposible.

¿Cómo pasó del negocio del software al de editor?
Soy un emprendedor, me gusta emprender, y me atraía mucho Internet. Me fijé en la música, el cine y las editoriales que en vez de tratar de sacar partido de la Red, no hacen más que luchar contra la Red. Internet está cambiando las cosas, permite que todo el planeta hable con todo el planeta, pero los editores prefieren que todos los autores hablen con ellos, y después decidir qué es lo que llega a los lectores. No entienden Internet. El paradigma que dibujamos con Lulu.com es como el de eBay respecto a Christie?s y Sotheby?s. Estas dos son casas de subastas tradicionales, y eBay transfomó su modelo de negocio, ahora gana 44.0000 millones de dólares al año, sin tocar para nada su negocio. Lulu está haciendo lo mismo con las editoriales a las que no creo que hagamos daño, y que hacen un trabajo excelente, pero hay otra categoría de libros como hay otra categoría de subastas en eBay. Nosotros ponemos las herramientas para que se puedan publicar estas obras pero sin intermediarios. Ya tenemos un millón de autores, y publicamos 200.000 libros al mes. No son malos, si no que el mercado para esos libros es muy pequeño..

¿Cuál es el proceso para publicar con Lulu.com?
Lo primero es escribir un libro. En nuestra web encuentras herramientas para editarlo, organizarlo, ponerle la portada,, sin que te cueste nada. Después decides si quieres venderlo en PDF o si quieres imprimirlo. Una calculadora de te ayuda a saber cuánto te va a costar la impresión según el número de páginas, y a partir de aquí fijas el precio para cubrir los costes de publicación. Las editoriales tradicionales dan al autor el 10% de los beneficios, con Lulu, los beneficios para el autor son el 80%. Todos tenemos al menos un cliente, nuestra madre. Y tu madre puede comprar tu libro con su tarjeta de crédito y esta será la primera copia que se imprima del libro. Después lo metemos en un sobre y lo enviamos por correo. Y con un solo libro que vendes habrás ganado dinero. Si lo vendieses por 10 euros, 8 euros serán tuyos y Lulu también hará dinero ,2 euros, y tu madre tendrá tu libro a un precio razonable. Este es un negocio que existía antes con las llamadas editoriales de vanidad, pero Lulu es diferente. No pedimos dinero hasta que vendes el primer libro. El cambio en el modelo económico es lo que está conduciendo nuestro éxito. Nosotros no somos editores de vanidad, somos un sistema de auto publicación.

¿Trabajan con distintas imprentas en todo el mundo? ¿Cómo se organizan para ser rentables?
Desde el principio nos planteamos Lulu como un negocio global. Si voy a plantear un servicio en Internet por qué tiene que ser sólo para el Norte de Carolina si hasta China puede acceder a él. Así que en vez de ser unos editores americanos, somos españoles o catalanes o franceses. Tenemos imprentas en Inglaterra, Italia, España, dos en Estados Unidos y estamos negociando para abrir dos nuevas imprentas en Japón y Australia. El ideal para un editor sería contar con 10 autores, y que cada uno vendiese 10 millones de ejemplares al año. Nosotros queremos justo lo contrario, queremos un millón de autores que vendan 100 ejemplares anuales

¿Cuántos libros hay que vender para ser un bestseller en Lulu.com?
Para mi, 1000 ejemplares anuales vendidos es un bestseller. Con estas ventas vas a obtener unos beneficios que van animar al autor a seguir publicando. Pero nuestros números están creciendo, no sólo en cuanto al número de autores, si no también las ventas de cada autor. Los que más están vendiendo este año venden, tres veces más. Uno de nuestros mayores éxitos es Putting The Hand On Cancer, que escribió una paciente de cáncer de pecho y trata sobre su experiencia durante el tratamiento y ofrece trucos para superar los dolores y subir el ánimo. Una compañía farmacéutica (Bristol Myers) descubrió el libro y pensó que sus clientes debían tener acceso a él, así que editaron 40.000 copias, lo que es una buena cantidad. Pero tenemos una docena de autores ganan unos 20.000 dólares por sus derechos autor. Este año multiplicaremos por tres esta docena de autores exitosos.

¿Qué pasaría si descubrieseis un Hemmingway? ¿Cómo puede luchar Lulu para retener a sus autores frente a las editoriales tradicionales?
Me encantaría que nos sucediesen este tipo de cosas. Entras en Lulu.com/es, tendrás todas las herramientas necesarias y se empezará a vender este libro sin que hayas hablado con nadie a no ser que quieras hablar con el servicio de atención al cliente. El editor eres tú. Si publicas un bestseller, y un editor te ficha, te puedes ir sin decirnos adiós. Nosotros estaremos tristes, pero es parte del acuerdo. Quizás sea naif pero pensamos que si te ofrecemos el mejor servicio, te quedarás con nosotros. Una de las principales razones es que vas a tener más beneficios con Lulu. El 80% de los beneficios son para el autor y este es el ingrediente secreto para que nos sean fieles.

¿Y qué pasa con la fama y el reconocimiento?
Si encuentras un editor que te lleva tu libro a todas las librerías y tu nombre a los periódicos, firma con ellos. Pero la mayoría de los autores no tiene esa experiencia, publica con editor pequeño, vende unos pocos libros y se olvidan de él. Los editores hacen un gran trabajo y hacen cosas que nosotros no sabemos hacer. Ellos trabajan para esos autores reconocidos y nosotros con el resto de la humanidad.

¿Cuál es su relación con las editoriales?
Es muy similar a la que mantenía con las empresas tecnológicas cuando empecé con el software de código abierto. Nos miraban como extraños, como marcianos. Los mejores ejecutivos tenían curiosidad y los peores nos miraban como si fuéramos tontos y no nos tomaban muy en serio. Actualmente tenemos una relación muy parecida con los editores. Ellos tratan la edición como una ciencia, examinan la mejor portada, corrigen los textos, han pasado cinco años en la universidad para hacer ese trabajo y de pronto ven estos libros "cutres", y se quedan incrédulos. Al final o fracasamos como ha sucedido con otros proyectos que creen que van revolucionar la industria; o tenemos un gran éxito, y entonces irán detrás de nosotros.

¿Dónde encajan en este modelo las librerías?
Las grandes librerías como Barnes & Noble, los buenos, comprenden que su negocio no es sólo vender libros, si no que son una actividad recreativa. La gente no va a la librería a comprar, si no a curiosear. Y eso es lo que están entendiendo las grandes cadenas, tienen espacios de lectura, ponen cafés, asientos?Y esas librerías son nuestras amigas. Muchas de ellas están interesadas, y se acercan a nosotros. Su negocio es tener los mejores libros que se venden, son buenos comerciantes, y pueden ser de gran ayuda para nosotros.

¿Cómo se protegen de los plagios? ¿Han tenido problemas con los derechos de autor?
Me siento muy cercano a los problemas de la música con el pirateo, pero muy crítico con las respuesta de las discográficas. Están tratando cambiar el comportamiento de los clientes en vez de tratar de adaptarse a lo que quiere el mercado. En Lulu puede pasar que un chico publique El Quijote y lo empiece a vender, algo que no queremos que suceda y tratamos de controlar. Lo bueno es que tenemos un millón de usuarios y todos están mirando y si ven que hay algo ilegal, van a alzar la voz. Respetamos los derechos de autor y lo decimos claramente. Si el autor quiere distribuir su trabajo de manera gratuita, puede hacerlo, pero no vamos a ayudar a robar el trabajo de otro. Nos gustan los derechos de autor. El peor problema que tuvimos en este sentido fue con un chico de Vietnam, que publicó las canaciones de artista pop y nuestras visitas se dispararon. Creo que estuvo activo dos horas y eso que era la seis de la mañana en EE UU.

¿Cree que los libros electrónicos acabarán por encontrar un hueco en el mercado?
Creo que finalmente se acabarán imponiendo, quizás dentro de 20 o 30 años. Hay que tener en cuenta lo rápido que han evolucionado los monitores, que han pasado de unas letras naranjas sobre un fondo negro a unas pantallas en color. La innovación sigue avanzando y llegará a encontrar la calidad necesaria para mejorar el formato de papel. Todo es cuestión de tiempo. Y en tu libro electrónico, que seguramente tenga páginas, podrás llevar no sólo un libro, tendrás los mismos que hoy puedes tener la mayor librería de Madrid, y además podrás acceder a los de Lulu a través wifi, y podrás comparar con otras ediciones o consultar dudas.

¿Qué le parece la iniciativa de Google para digitalizar libros?
He discutido sobre este tema con mi amigo Larry Lassig (fundador de Creative Commons), que defiende que es bueno porque la ley de copyright habla de los usos justos, y cree que Google hace un uso justo porque no reproduce el libro entero. Google escanea todo el libro, y sólo te muestra una parte en la que aparece la parte que estás buscando. Pero a mi me parece que Google hace esto no para que el mundo sea mejor, si no para mejorar sus acciones, y lo está haciendo a costa del trabajo de otros, y si ellos están de acuerdo no me parece mal, pero si estas en contra, no es justo. Creo que es el momento de que se abra un debate público, que creo que es lo mejor que puede suceder antes de que llegue ninguna legislación.

viernes, 10 de noviembre de 2017

Columna de RAMÓN PALMERAL, en Mundiario, sobre temas culturales



                                                                 Ramón Palmeral


 MUNDIARIO, COLUMNA DE RAMÓN PALMERAL sobre cultura, preferentemente alicantina:
http://www.mundiario.com/author/ramonpalmeral

jueves, 9 de noviembre de 2017

Exposición: Azorín, la fama postuma. Sala de exposiciones de la Diputación de Alicante





Hace unos días, el martes concretamente estuve en la Diputación de Alicante visitando a mi amigo Pablo Sandoval, adjunto a la presidencia, quien me invitó y acompañó a ver la magna exposición “AZORIN. LA FAMA PÓSTUMA”, en el Salón de Exposiciones del Palacio Provincial, que se ha montado con motivo de los actos del IV Congreso Internación: Azorín en la modernidad literaria,  puesto que este año 2017 se cumple el cincuentenario de la muerte de José Martínez Ruiz (1873-1967), más conocido por el seudónimo de Azorín, natural de Monóvar (Alicante), en cuyo cementerio municipal se haya su cenotafio. Hay opiniones muy contradictorias respecto del origen y procedencia de este apellido, que adoptara José Martínez en 1904. Unos le hacen diminutivo del apellido aragonés "Azor", muy antiguo en Huesca. Otros autores opinan que tiene el mismo origen de Zaurín y Saurín, originario de Cataluña, de donde bajó a la reconquista de Valencia y Murcia, teniendo antes su cuna en Francia. Lo probable es que lo tomara de un personaje llamado Antonio Azorín (apellido frecuente en Yecla donde situó sus novelas modernistas: La Voluntad, Antonio Azorín).
Dicha esta "introdomancia", quizás innecesaria para los eruditos azorinianos, yo me considero más azorinista  que azoriniano, entendiendo por azorinista el que adjetivo que se atribuye a los seguidores o adictos a Azorín. En lo que a mí respecta soy azorinista porque me considero epígono del estilo impresionista del “maestro de Monóvar”, como también se le conoce (añadiría impresionante maestro de Monóvar). Mi afición azorinistas se estimuló, recargó o se expandió, desde que en 2002 visité la Casa Museo de Azorín en Monóvar, de la mano maestra-guía de su director José Payá Bernabé, no la casa natal de la calle Cárcel cerca del Ayuntamiento de Monóvar, que lamentablemente está en ruinas y huele a vieja humedad. La Casa Museo es un paraíso para los bibliófilos.
Azorín acabó con la retórica y los largos circunloquios del romanticismo. Y como me considero seguidor de su estilo directo y minucioso (atómico lo llaman otros), os invito a que "volvamos", como escribiría Azorín, al usar el plural para dirigirse al lector al que llamaba “vosotros” a la Sala de exposiciones.  Yo he decidido usar la primera persona del singular, debido a los tiempos democráticos en el que todos somos ya iguales, al menos en la teoría constitucional.
Bien, me situó de nuevo, vuelvo a la sala de exposiciones del Palacio Provincial, que huele bien, con un toque femenino, quizás porque lo atiende una simpática azafata que nos da los buenos días y unas hojas. Acompañado de mi privilegiado, entusiasta, y entendido guía privado Sandoval, veo, observo una sala iluminada sobre encalado blanco, claro, silencio y acogedor, donde nada más entrar veo el cuadro de un José Martínez, juvenil y lozano del pintor alicantino Adelardo Parrilla tratado en gama cálida sobre fondo negro, es una gran obra. En un lugar central del semicírculo que abre la sala como un arco de ballesta (alejado del extintor de incendios) se cuelga el famoso cuadro de Azorín sedente o  sentado ante un paisaje de Castilla que del pintor vasco Ignacio Zuloaga, un pintor famoso en el régimen franquista, aunque Azorín no lo fue, ni tampoco falangista. Hay un panel que recuerda al filósofo y escritor francés del siglo XVI, Michel de Montaigne, cuya obra Ensayos, leyó y releyó Azorín para imitarle. Quizás por ello Gonzalo Torrente Ballester dijo una vez: “Azorín comenzó a escribir en castellano con la estructura sintáctica francesa”. En lo que respecta a las frases cortas, las oraciones simples coordinadas y yuxtapuestas, pero rehuía de las subordinadas. Usaba periodos cortos oracionales que entrelazada con el punto y como y cerraba con un punto y seguido.
En uno de los salones, al fondo, contra la pared silenciosa se hallaba una gran serigrafía en blanco y negro donde Azorín se nos presenta escribiendo en una vetusta máquina mecánica, de la era analógica, en la que al  maestro le tocó vivir. Quizás estuviera escribiendo una carda a don Miguel de Unamuno, a Antonio Machado, a Pío Baroja o a Ramiro de Maeztu quien  fuera fusilado por miliciano en el cementerio de Aravaca el 29 de octubre de 1936. Pero esta es ya otra historia que el lector puede encontrar en mi libro Cincuentenario de la muerte de Azorín, Amazon.
Al pie de esta gran fotografía de "Azorín mecanógrafo", aunque la mayoría de sus escritos los escribía, redactaba y creaba con una pluma estilográfica de aquellas que se  recargaban con un émbolo o cartucho de goma de la sangre azul de un tintero cristal de la marca Pelikan. Las estilográficas las había de diferentes marcas aunque las primeras Parker fabricadas en Estados Unidos llegaban a España de contrabando por Gibraltar.  Pues en esta sala luminosa de lamparas led se haya una máquina de escribir negra de la época de las Underwoord, sobre una mesa que también es un mueble de época más bien de principios del XX, donde Sandoval me retrata para la posteridad digital.
Encabecé este breve y corta crónica con el título: “El estilo impresionista de Azorín”. Escribo esta crónica a imitación del estilo que  usaba Azorín, donde he empleado los sentidos de la vista, el oído, el olfato y las sensaciones y recuerdos (no el tacto porque nada de lo expuesto se puede tocar). A Azorín le gustaba inventar neologismos y sacar del diccionario arcaísmos, cuidaba y se detenía en los detalles, al considerar que el detalle es lo que define el estilo personal del escritor; tenía un ojo de pintor impresionista; y sobre todo, más que nada le gusta el uso de los epítetos en lugar de los verbos, que son acción, y lo escritos azorinianos son todo lo contrario: son narraciones lentas, descriptivas,  relajaciones, erudición, periodismo actual y amor al paisaje.
Una exposición digna de visitar, admirar y recapacitar sobre nuestro pasado que se nos distancia a la velocidad de un planeta alejándose de su estrella. Permanece abierta desde el 18 de octubre hasta el 11 de noviembre. Sala es exposiciones de la Diputación en la Avenida de la Estación, 6- Alicante.
Ramón Palmeral
Alicante, 09-11-2017

sábado, 4 de noviembre de 2017

Presentación del libro Hablan los poetas de Espejo de Alicante

    Palmeral, Consuelo Giner en la Presentación del libro "Hablan los Poetas" 24 de octubre 2017.


Palmeral con Jovita

                                             Ramón Fernández Palmeral. Foto de Franchi

LEER LA CRÓNICA DE Ramón Palmeral en MUNDIARIO

martes, 31 de octubre de 2017

"El Diablo cojuelo". Novela de 1641.

 Por Ramón Fernández Palmeral

Hace unos día tomé de mi biblioteca un ejemplar del El Diablo cojuelo del escritor sevillano Luis Vélez de Guevara (Écija, 26 de agosto de 1578), una edición de Cátedra de 1984, al cuidado del profesor Enrique Rodríguez Cepeda (Palencia, 1939), en cuya introducción leo en la página 17 lo siguiente: “…se trata de una visión política de la vida española actual (1640,clave de la decadencia, independencia de Portugal y revuelta de Cataluña, fin de Olivares [Conde duque de Olivares, Gaspar de Guzmán y Pimentel Ribera y Velasco de Tovar], etc., etc.,”.  Aunque lo que dice Enrique Rodríguez no es del todo cierto, porque la revueltas de Portugal se inician en 1640, y 28 años después en 1668, consiguió la independencia en el reinado de Carlos II.
La primera edición de El Diablo cojuelo es de la imprenta del librero del rey Alfonso Pérez, de Madrid de 1641, bajo el mecenazgo de Rodrigo Sandoval, de Silva y de Mendoza, Duque de Pastrana (hijo de la princesa de Éboli y del porgugués Ruy Gómez de Silva). Tuvo la novela tal éxito que se realizaron tres impresiones diferentes y otra en Barcelona, en 1646 de la imprenta de Sebastián de Cormellas Mercader a quien no le importó hace una edición, a pesar de que el 17 de enero de 1641, Pau Claris i Casademunt había proclamado la República Catalana, canónigo de la Seu de Urgel y Presidente de la Diputación del General de Cataluña. Seis días después, el 23 de enero decide entregar, la incipiente república, al rey Luis XIII de Francia, coronadolo como Conde de Barcelona, poniendo así el Principado de Cataluña bajo la soberanía del país galo, enemigo de España. Lo cual demostraba el odio catalán por España.
Entre la intertextualidad del Diablo cojuelo y Cataluña actual viene a cuento, porque pareciera que después de 366 años transcurridos hasta nuestros días, la miserias y puñadas traperas continúan en esta España
El 7 de junio de 1640, fiesta del Corpus, rebeldes catalanes mezclados con segadores que habían acudido a la ciudad para ser contratados para la cosecha, entran en Barcelona y estalla la rebelión de los segadores. Con el asesinato del noble catalán, virrey de Cataluña, Dalmau Queralt, Conde de Santa Coloma. Después, el 26 de enero 1641, un ejército franco-catalán derrotó al ejército español en la conocida batalla de Montjuit, debido a que Felipe IV tenía al ejército en Portugal.
Y como la historia se repite, por haberse proclamado por los parlamentarios independentistas catalanes, bajo voto secreto, el 27 de octubre de 2017 la República ilegal de Cataluña, me ha interesado leer El Diablo cojuelo, para ambientarme de la época decadente española del siglo XVII.  Porque esta novela de ficción y crítica social, con gran sentido del humor se divide en trancos o saltos y no en capítulos, como era lo usual, para llevarlos en volandas por la miserias de España. No habla Luis Vélez de Guevara de la situación política y decadencia, en la cual el rey Luis XIII de Francia había declarado la guerra a España. Felipe IV llevó a la frontera con Cataluña a un ejército, pero los catalanes no aceptaron dar alojamiento ni alimentos a las tropas del Conde-Duque de Olivares. El Borbón Luis XIII, era ya Conde de Barcelona con el nombre de Luis I desde 1641 a 1643.
La novela de El Diablo cojuelo, no nos habla de los sucesos de Barcelona, porque evidentemente, el autor no tenía acceso a estas noticias históricas. Pero sí nos habla de la sociedad de la época decadente, porque en el fondo es una novela de sátiras social, más que picaresca. En ella, un estudiante, don Cleofás Leandro Pérez Zam­bullo, escapando de la justicia por los te­jados de la corte de Madrid, a causa de una aventura con doña Tomasa de Bitigudiño (doncella chanflona o grosera por no decir licenciosa), va a caer en la buhardilla de un astró­logo, aquí en el desván encuentra una redoma (vasija de vidrio), que a modo de lámpara maravillosa como la de Aladino cuando saca de ella al Mago; y Don Cleofás saca de la redoma a un pequeño diablo y sabio por ser diablo y cojo, y un ángel caído en desgracia. Desconocemos si el autor describe al diablo cojo para burlarse de la cojera del autor de “El Buscón”, don Francisco de Quevedo, al que Luis Vélez de Guerra admiraba, sin duda alguna.
El estudiante Don Cleofás, homónimo uno de los discípulos a quien Jesucristo una vez resucitado se aparece en la localidad de Emaús (Lucas, 24,18), viaja jundo al diablejo, que, agradecido por haberle sacado del interior de la redoma, le lleva, volando, a lo alto de la torre de San Salvador, la más alta de Madrid, desde donde, levantando la tapadera de los tejados (ver el dibujo de Goñi,1960), le muestra las miserias, trapacerías y engaños de sus habitantes. Entre la intertextualidad del Diablo cojuelo y Cataluña actual viene a cuento, porque pareciera que después de 366 años transcurridos hasta nuestros días, la miserias y puñadas traperas continúan en esta España constitucional vapuleada por un separatismo catalán sin sentido. Porque en realidad la envidia no mira ociosa mientras nosotros nos lanceamos con odios y resentimientos ancestrales. @mundiario

domingo, 29 de octubre de 2017

“La mujer del Amadorio” una novela negra fuera de lo común, comentado por Pilar Galán





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El marco que ha elegido el escritor Ramón Fernández Palmeral (bajo el seudónimo de Harry el expicoleto) para situar esta novela de intriga ha sido la Costa Blanca, y esto es algo que en un  principio nos puede sorprender por lo insólito y original. Editadopor Amazon venta online.
El pueblo de Villajoyosa de Alicante, conocida como la cuidad de la Luz, va a ser el lugar para ubicar esta novela negra, que como su nombre indica, es un género novelístico donde el lado más oscuro, la niebla y la bruma imperan en toda su plenitud, por lo que situar esta novela en la Costa Blanca ya supone un giro novedoso en este género.
El escritor va a dar vida a un investigador privado, el expicoleto Harry, antiguo guardia civil, que encarna la figura del antihéroe por su aspecto poco agraciado, en tratamiento psiquiátrico como consecuencia del tiempo que sirvió  en el País Vasco, aficionado a los porros y al alcohol, pero dotado del más fino olfato detectivesco, que le llevará a ser muy brillante en el ejercicio de su profesión.
El autor nos va introduciendo con gran maestría y una imaginación prodigiosa en los entresijos de un mundo, el de la investigación criminal, que él conoce a la perfección y que le llevan a recrear unas situaciones llenas de misterio  e intriga que son el resultado de la fascinación que él siente por todo lo policiaco,  a la vez que nos va haciendo partícipes de los distintos pasos que se llevan a cabo para resolver un crimen.
La historia narra la investigación de la muerte  de una joven que aparece ahogada, flotando sobre las aguas del embalse del Amadorio en Villajoyosa y rodeada de unos símbolos exotéricos, que llevan al detective  a tratar de descifrar este misterioso asesinato, para su investigación va recabando información en numerosos  lugares e interrogando a diversas personas para que le ayuden en sus averiguaciones, como son una periodista, una fulana de lujo y hasta un fraile experto en plantas autóctonas.
La trama que se va desarrollando nos atrapa desde primer momento de la lectura, ya que las situaciones que  se van sucediendo hacen referencia a lugares muy conocidos de la ciudad de Alicante que es donde  vive el detective Harry,  así como de toda su provincia.
Hay que destacar la originalidad de cómo los capítulos llevan los nombres de las cartas del tarot. Así tenemos: la muerte, el carro, la estrella, el loco  y a cada carta la hace corresponder con un personaje de la historia según el arcano que represente, de este modo nos va presentando  al abogado Ridruejo, a su amiga Claudia, a la cabo primero Marta y a un sin fin de personajes.
Es de destacar, que nos encontramos no sólo ante una novela negra o policiaca sino que esta historia es una evocación de los terribles días en que la ETA golpeaba con dureza a unas víctimas inocentes y como los guardias civiles  dieron  generosamente su vida por perseguir a sus asesinos, sufriendo en sus carnes unos estigmas que perdurarán durante toda su vida.
Claro ejemplo lo tenemos en nuestro protagonista el expicoleto Harry, que todavía padece crisis de pánico, angustia y depresiones como consecuencia del llamado “Síndrome del Norte”.
También en esta novela afloran las pasiones amorosas y eróticas de unos personajes profundamente  humanos, para dar un tinte sentimental y real a la historia, en medio de ese torbellino de peripecias que se van sucediendo a lo largo de la novela, donde no falta de nada, y hasta se nos describe con una agilidad cinematográfica como unos matones persiguen al protagonista a lo largo de un muelle en el puerto alicantino.
El autor como buen conocedor del mundo del Arte y de las letras deja afluir sus conocimientos sobre la pintura,  para buscar la clave del asesinato de la joven Melanie, la cual  aparece ahogada rodeada de unas hermosas flores de colores,  al igual que la hermosa joven que aparece en  el cuadro de un conocido pintor inglés. El desenlace totalmente inesperado no nos dejará impasibles, pues el autor también tiene un guiño para las nuevas tecnologías que serán la clave para resolver el enigma.
La mujer del Amadorio confirma plenamente la destreza narrativa de Ramón Fernández Palmeral, avalada por una serie de novelas históricas y autobiográficas, junto con un sin fin de ensayos y artículos de divulgación que ponen de manifiesto su virtuosismo a la hora de narrar.

Pilar Galán García 
Escritora y poeta

En realidad en como el guión de una película.

viernes, 27 de octubre de 2017

IV Congreso Internacional Azorín en la modernidad literaria. 26 de octubre en Aula de la CAM

                          (José Ferrándiz Lozano, Renata Londero y Cecilio Alonso. Aula de la CAM

(José Ferrándiz Lozano)
(Cecilio Alonso)
                                                    (Ramón Palmeral, y Pedro Ignacio López García)
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II Jornada del dia 26 por la tarde. Aula de la CAM, Dr. Gadea 1, Alicante)

18.30 h.
Presidenta de la mesa: Sr. Renata Londero (Universidad de Udine).
Conferencia de Cecilio Alonso (UNED)
Ponencia:  "Mercurio. Semanario sin dogmas. Desidencias Intelectuales".

19.00 h.
Dr. José Ferrándiz Lozano (Director del IAC Juan Gil-Albert)
Ponencia:"Azorín. dos romanticos con pelo largo a en la ruta de Don Quijote".

19.30
Coloquio con rueda de preguntas del público.


miércoles, 25 de octubre de 2017

Pablo Sandoval, Miguel Valor y Ramón Palmeral en el Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert.

Participantes en la inauguración del IV Concrego Internacional Azorín, e n la modernidad literaria. 24 de octubre de 2017


Inauguración del IV Congreso Internacional Azorín en la modernidad literaria

José Martínez Ruiz “Azorín”, es el escritor más relevantes de Alicante, nacido en Monóvar, un pueblo del Valle del Vinalopó, en 1873, del que se han organizado cuatro congresos, con el presente, y a pesar de los estudios que se han realizado, siempre nos sorprenden sus lecturas y hallamos alguna serendipia. Ahora en 2017, aprovechando los cincuenta años de su muerte, ocurrida en Madrid el 2 de marzo de 1967, la Diputación de Alicante, a través de sus Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert, junto al Centro de estudios Literarios Iberoamericanos Mario Benedetti y la Fundación Caja Mediterráneo con la colaboración de Ayuntamiento de Monóvar han organizado el I Congreso Internacional, “Azorín en la modernidad literaria”. Cuya dirección académica corresponde al Sr. Miguel Ángel Lozano (Universidad de Alicante) y Dr. José Ferrándiz Lozano (Director del IAC Juan Gil Albert)

A las 11.15 horas del 25 de octubre en el aula de el IAC Juan-Gil Albert de la casa Bardín de Alicante, y con la asistencia del vicepresidente de la Fundación Caja Mediterráneo, Miguel Valor. El vicerrector de Cultura, Deportes y Política Lingüística de la Universidad de Alicante (UA), Carles Cortés, alcalde de Monóvar Natxo Vidal y  Presidente de la diputación Cesar Sánchez, y presentados por José Ferrándiz Lozano se inició la apertura del congreso, con la asistencia de numeroso público y participantes entre ellos César Augusto Asencio diputado de Cultura, y Pablo Sandoval, asesor de la presidencia, Cecilio Alonso, José Agustín Gilabert, José Payá, director de la casa Museo de Azorín en Monóvar, Miguel Ángel Lozano, Juana María Balsalobre…

Dado por finalizada el acto oficial de la apertura del congreso, José Ferrándiz presentó al primer ponente Juan Manuel Bonet (actual director del Instituto Cervantes) y de un amplio currículo tanto literario como en las artes, que tuvo el honor de abrir el congreso. Durante una hora entre las 11.45 y las 12.45, disertó sobre la vida y obra de Azorín, con un dominio absoluto del tema preparado, que ilustró con diapositivas, finalizando con los retratos dedicados a Azorín como el de Sorolla, Zuloaga, Genaro Lahuerta López, y algunos apuntes de otros artistas.  Tras su ponencia finalizó los actos académicos en el salón de actos del IAC Juan Gil Albert, los asistentes  se desplazaron a ver la exposición “Azorín, la fama póstuma”, en la sala de exposiciones de la Diputación de  Alicante.

El congreso abarca tres días, los días 25,16 y 27 entre Alicante y Monóvar, cuyo acto cerrará la hispanista norteamericana Robert Johnson (Universidad de Kansas, con la ponencia “Lo que aprendió la exiliada María Zambrazo en Azorín”. Para los no avezados en filosofía, con comento que María Zambrano nació en Vélez-Málaga en 1904, alumna de Javier Zubiri, republicana por convicción, amiga de Miguel Hernández colaboró con la revista “Hora de España” en Valencia durante la guerra civil, y finalizada la guerra estuvo exiliada en Nueva York, La Habana y México. Premio príncipe de Asturias y Cervantes, falleció en 1991.
También se ha previsto un homenaje en el panteón donde reposan los restos mortales de Azorín, en el cementerio municipal de Monóvar desde 1990, que fueron traídos desde Madrid.

La figura literaria de Azorín es inconmensurable, por sus libro y artículos sobre todo los relacionadas con Cervantes y el Quijote del que se cuentan cerca de 400 artículos, novelas vanguardistas con la Voluntad, periodista parlamentario, reseñas literarias de los clásicos,  crónicas de cine,  cinco veces diputado a Cortes, tres viajes a París, autor teatral, innovador del lenguaje y maestro del estilo periodístico actual, mas su difícil periodo de articulista en el régimen franquista, quien había regresado a España después de su exilio en París (1936-1939), gracias a la protección que le ofreció Ramón Serra Suñer, el cuñado de Franco, cuando ejercía de Ministro del Interior, y después de Asuntos Exteriores.

Ramón Fernández Palmeral autor de “Cincuentenario de la muerte de Azorín” en Amazon (ventas on-line).